domingo, 5 de marzo de 2006

Ahora quién soy?

Mi nombre es Héctor Manuel García Caballero, soy médico veterinario y zootecnista egresado de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán. Me he especializado en la clínica de pequeñas especies (perros y gatos principalmente) y estuve desarrollando esta actividad durante más de doce años en la Ciudad de México, hasta que por razones evidentes la incapacidad me lo permitió.

Actualmente todavía continúo consultando a clientes y personas que me brindan su confianza y yo trato de ayudarles con los problemas en que muchas veces no encuentran diagnóstico acertado para sus mascotas.

He recibido buenas proposiciones sobre la edición de una publicación para niños: por medio de imágenes y un cuento breve buscaría crear consciencia y educar para el trato y la responsabilidad de tener mascotas.

También tengo la intención de hacer un espacio en Internét con fines útiles para los propietarios de las mascotas, que a la vez sea un medio de publicidad para el gremio veterinario. Un portal web con consejos e información veterinaria administrado por mí, para cuyo mantenimiento se solicitaría patrocinio de algunos laboratorios y empresas.

Todas estas proposiciones, comprendo, requieren fuerte inversión y un apoyo inicial con el cual no cuento ahora; sin embargo, me gustaría apoyar por medio de estos medios no sólo mi supervivencia, sino también buscar la manera de ayudar a otras personas que padecen esta enfermedad que yo tengo.

Breve historia de mi enfermedad


Ahora tengo la oportunidad de expresarme por mí y por muchas personas que padecemos esta extraña enfermedad llamada esclerosis múltiple. Esta es una enfermedad de las llamadas autoinmunes, porque es el mismo cuerpo quien lesiona en este caso al sistema nervioso central básicamente el recubrimiento de los nervios llamado mielina.

De acuerdo con la frecuencia, intensidad y duración de cada ataque, la esclerosis múltiple se clasifica como remitente recurrente -porque presenta brotes que pasan y pueden volverse a presentar como exacerbación es o con nuevas secuelas y presenta cierta recuperación después de cada brote-, o como progresiva, en la que el brote no remite, sino que continúa progresando con diferentes incapacidades; también hay una clasificada como secundaria progresiva, que inicialmente fue de brote remisión (remitente recurrente) pero cambió para hacer progresiva la incapacidad. Actualmente, se investiga intensamente sobre la enfermedad, con grandes esperanzas de acuerdo con los descubrimientos que continuamente se están haciendo alrededor de ella, pero desafortunadamente todavía falta mucho, pues se investiga tanto epidemiología como la misma patología de la enfermedad, con diferentes resultados.

Sin embargo, avances en el tratamiento hay muy pocos: el tratamiento actual trata de modificar el curso natural de esta enfermedad, desafortunadamente, con poco resultado.

Existen tratamientos para las secuelas, pero hoy por hoy el tratamiento indispensable para prevenir las complicaciones y rehabilitar en medida de lo posible, es la terapia física, que desafortunadamente en las condiciones que muchos nos encontramos no es fácil poder llevarla y en algunos casos pareciera imposible.


Donde fui diagnosticado y tratado los primeros años

http://www.innn.edu.mx/esclerosis.htm

Bohemio y jugador

Desde temprana edad aprendí algunos entretenimientos de baraja española y americana, pero con la mala suerte de nunca salir triunfante en el juego... Y con el trauma de ese méndigo dicho de que "afortunado en el juego, desafortunado en el amor", o viceversa... Pero ni una ni otra, en mi caso.

Varios años después de mi infancia, en mi alcoholescencia, volví a incursionar intensivamente en el juego durante largos e interminables fines de semana, que cursaban noches en vigilia, arañando el hígado con malas y regulares bebidas; y en ocasiones muy afortunadas, muy distinguidos tóxicos, pero ni el amor ni el juego se hicieron presentes.

Años más tarde, me convencí que el juego no era para mí, y el amor me parecía un lujo.